A tu peque, ¿le pica la ropa que le pones? ¿Le parecen las luces demasiado estridentes? ¿Se lleva la comida a la boca y las texturas le dan náuseas? ¿Tiene miedo a jugar en los parques? ¿Tiene problemas de comportamiento?
Éstas son sólo 5 preguntas que nos pueden alertar de que un/una niñ@ tenga Trastorno del Procesamiento Sensorial o TPS. Las dificultades en integración sensorial son problemas a la hora de manejar la información que recibimos a través de los sentidos. Eso quiere decir que, el/la niñ@ puede ser demasiado (hipersensibilidad) o poco sensible (hiposensibilidad) a las experiencias sensoriales, o ambas incluso.
Vamos a profundizar más. ¿Me acompañas?
Signos que nos harán sospechar de un TPS
No hay una señal o un síntoma en concreto que nos haga confirmar a simple vista que el/la peque tiene dificultades en la integración sensorial, pero hay casos en los que se nota más y otros que son más leves y no se nota a simple vista. Por eso, si no lo tienes claro, consulta con un/a profesional de la Terapia Ocupacional, son l@s únic@s profesionales capacitad@s para detectar o descartar un TPS.
Ahora, voy a nombrar algunas actitudes o comportamientos que pueden ayudarnos a identificar esos problemas de procesamiento sensorial:
- Tiene dificultad para concentrarse en una actividad.
- Se agobia con facilidad con la gente o en algunos lugares.
- Se niega a utilizar ropa que le “pica” o es “incómoda”.
- Reacciona con intensidad o con náuseas a ciertas texturas de alimentos.
- Tiene una dieta muy limitada de alimentos.
- No le gusta que le toquen o abracen.
- Evita hacer actividades que otr@s niñ@s hacen.
- No tolera ruidos fuertes, ni luces estridentes, ni olores intensos.
- No le gustan los cambios.
Lo más importante al detectar algunas de estas señales es fijarse en si el comportamiento de l@s niñ@s le impide tener relaciones significativas con l@s demás. En ese caso es súper importante, de la mano de un Terapeuta Ocupacional, evaluar al/la peque por si tiene TPS.
Intervención desde la Terapia Ocupacional
L@s terapeutas ocupacionales, como aquí una servidora, ayudamos a est@s niñ@s a procesar mejor la información sensorial y a controlar sus reacciones adquiriendo estrategias de autorregulación, alcanzando grandes logros cuando se trata de una intervención temprana.
Además, con estrategias específicas y con la ayuda de las familias y maestr@s conseguimos hacer grandes cambios. Acordaros de las “dietas sensoriales” que nos encantan a los terapeutas, aquí os dejo un par de ejemplos:
El TPS, el TEA y el TDAH
Cabe destacar, que el Trastorno del Procesamiento Sensorial puede darse también junto con otros diagnósticos como son Autismo (TEA) o Trastorno por Déficit de Atención e hiperactividad (TDAH), aunque puede darse de manera única.
Sin embargo, hay muchos estudios desde la Terapia Ocupacional que revelan que l@s niñ@s diagnosticados con problemas de integración sensorial, en su gran mayoría, tienen también TDAH.
Recuerda, que también puedes trabajar la integración sensorial sin sala, te lo explico aquí.
Qué dices, ¿Te ha gustado? ¿Preparo una guía chula sobre Integración sensorial?
Buenas , si que es bastante interesante el tema , mi hijo con 2 años y 3 meses le han detectado TPS , llevo leyendo artículos , blogs etc sobre los síntomas pero aún no he encontrado ninguno que hable sobre cómo ayudarlos a incorporar alimentos nuevos ( es el caso de mi hijo ) no se si tienes algún artículo sobre eso , un saludo .
Hola mi niña!! Si te soy sincera, mejor no haber encontrado nada. Es un trabajo muy complejo que si se resumiese en un libro podría hacer sentir que con 4 cosas se arregla, y no es cierto. Suele ser una intervención larga y que requiere muchas estrategias específicas a cada niñ@. A demás, al no cumplirse las expectativas, te frustrarías y eso podría influir en tu peque también. Seguro que hay alguna terapeuta ocupacional por tu zona que te puede echar una mano. Mil gracias por tu comentario, seguro ayudas a mucha gente que lo lee. Un abrazo